El papel del mentor en el proceso de investigación
La mentoría en los procesos de enseñanza e investigación adquiere un papel importante, debido a su colaboración en el logro exitoso de los resultados propuestos y en la aplicación social de ellos.
La mentoría se puede definir como la relación que se establece entre una persona con más experiencia en un ámbito o disciplina, al que se llama “mentor” y otra persona con menos o ninguna experiencia a quien se llama mentorizado o “aprendiz”, con el fin de desarrollar sus competencias, habilidades y motivación que lo lleven a alcanzar las posibilidades de éxito en su trabajo de investigación, siendo el papel del mentor el elemento clave que pueda llevar el proceso a buen término.
Colaboración y Aprendizajes
Investigación y reflexión
Crecimiento profesional y personal
En esta relación se suscitan ciertas inquietudes que giran alrededor del tiempo que debe dedicarse a esta mentoría o quién se llevará el crédito por las ideas que se generen en esta relación. Una forma de resolver estas inquietudes es la de establecer acuerdos en los que se definan claramente las responsabilidades mutuas, los compromisos de participar en un ambiente de aprendizaje e investigación que resulte productivo, así como también los acuerdos de preparar a los mentorizados, para que se conviertan en investigadores o de llevarlos al término exitoso de su investigación.
Se puede señalar entonces que las funciones que realiza el mentor se relacionan con: ser el modelo, no solo de los métodos de enseñanza sino también del entusiasmo en la realización de la labor de investigación; ser el patrocinador en tanto pone en ejecución las herramientas a su alcance para apoyar el desempeño del aprendiz y la de enculturación en la que se llevará al aprendiz a entender la cultura en la que está ingresando o el de colaborador, coordinador, supervisor y orientador.
En la actualidad, la relación vertical de la mentoría se ha ido desplazando en favor de una mentoría con una modalidad más horizontal en la que la relación está más homogeneizada, más conceptualizada como una relación entre pares con miras a tener una relación de igualdad en la que se compartan los problemas, experiencias, empatía o ayuda mutua.
De esta forma el mentor desarrolla un papel de aceptación del aprendiz para acompañar, facilitar, favorecer o potenciar sus acciones a lo largo de la investigación mediante conversaciones reflexivas que provoquen no solo al crecimiento profesional sino también al personal. Así la realización de mentorías se convierte en un elemento clave en las instituciones que desean contribuir en la ampliación de la cultura de investigación, en las transformaciones sociales y en la creación de un clima de mayor confianza y comprensión de las necesidades del mentorizado y la forma de satisfacer, de mejor manera, sus necesidades.
Es por esto que en “elcentro” estamos interesadas en impulsar las mentorías que generen ambientes genuinos y efectivos de colaboración y posibiliten aprendizajes significativos, cuyos aportes sean representativos para el aprendiz, para el mentor y para las instituciones que lo aplican.
